Tener dinero ahorrado debe volverse parte del plan de vida, porque una persona que empieza a guardar dinero está comenzando a construir su futuro y, a la vez, los ahorros le ayudarán en situaciones imprevistas como: enfermedades, emergencias y, por qué no, en aquellas que ya están programadas como el inicio de la vida educativa de los hijos, un viaje en vacaciones o la compra de algún inmueble o propiedad.
Pilar García Tamariz, docente del área de Administración general de la Universidad de Piura, comenta cuáles son los cinco problemas más comunes que se pueden presentar al momento de organizar y ejecutar un plan de ahorros:
1. No tener una meta realista y concreta
Muchas veces proyectamos objetivos muy ambiciosos. Ser optimistas está bien, pero también debemos aspirar a cifras realistas. Es fundamental no imponerse montos que afecten el presupuesto regular de cada mes.
“No tiene ningún sentido, ahorrar una cantidad muy alta que nos haga pasar penurias para llegar a fin de mes. Lo mejor es comenzar con ahorros pequeños y mantener la disciplina con esa meta”, precisó la especialista.
2. No revisar tus ingresos y los gastos mensuales que realizas
En la mayoría de los planes de ahorros, las personas no miden sus ingresos ni los gastos que realizan, lo cual genera que al momento de querer empezar un plan de ahorros no se tenga la mínima idea de cuánto se podrá aportar mensualmente, generando que no se logre el objetivo propuesto.
En este caso, la profesora García Tamariz indica que todas las personas deberían tener un plan de ahorros. “Tenemos que revisar nuestros ingresos y gastos anuales porque de esa forma seremos conscientes de cuánto dinero estamos aportando mensualmente a nuestro ahorro. Si no llevamos la cuenta del dinero que tenemos guardado, cuando llegue el momento de usarlo, nos puede sorprender que no sea la cantidad que esperábamos”.
3. Usar cualquier sistema financiero y no monitorearlo
Esta es otra de las cosas más comunes que suelen pasar al momento de ahorrar dinero en una cuenta bancaria. Por ello, es importante revisar la tasa de interés, el costo de mantenimiento u otros factores que podrían afectar la cantidad depositada. Es recomendable monitorear la cuenta bancaria constantemente, de esa manera si llegara a ocurrir algo se podrá actuar de forma inmediata y evitar algún descuento.
“Claramente en estos casos es donde más se ve perjudicado el ahorro de una persona, ya que algún factor, aunque sea mínimo, puede hacer que tu depósito disminuya. Por ello, es fundamental un monitoreo constante para prevenir algún suceso que afecte nuestro ahorro y, por ende, a nosotros”, señala la profesora García.
4. Creer que lo sabemos todo
Un error más, el cual puede poner en peligro un ahorro, es creer que se sabe todo. Esto puede llegar a ser grave y ocasionar que se pierda todo lo ahorrado o ponerlo en riesgo. Por esta razón, es ideal que se consulte a un experto, lo que ayudará a estar mejor informado y tomar mejores decisiones sobre donde es más conveniente depositar nuestros ahorros.
5. Generar nuevos gastos o deudas
Si llegas a generar nuevos gastos o deudas puede ser perjudicial para tu plan de ahorros porque afectaría tus ingresos netos, por ende, podrías ahorrar menor cantidad de dinero o nada.
“Las personas deben de conocer muy bien sus gastos y saber que si están en plan de ahorros deben, en lo general, evitar generar gastos hasta que termine su plan. A la vez, deben ser realistas, ya que si el nivel de gasto es mayor puede llegar a consumir todos sus ingresos, lo cual es perjudicial, ya que de una o otra manera el importe que se va a ahorrar disminuiría”, resaltó la docente UDEP.