La trata de personas sigue siendo un grave problema en Perú, y lamentablemente los menores de edad son las principales víctimas. De acuerdo con datos del Ministerio Público, solo en el 2023 se registraron más de 1,100 casos de este delito, que afecta principalmente a niñas, niños y adolescentes. Esta alarmante situación exige mayor atención a la protección de los menores, especialmente en entornos digitales, donde el peligro del grooming es constante.
Un estudio realizado por Grooming Latam y CHS Alternativo indica que el 50% de los menores peruanos ha tenido contacto con desconocidos en internet, lo que los expone a diferentes formas de manipulación. Patricia Paulet, subdirectora de la Facultad de Tecnología e Ingeniería de IDAT, enfatiza la importancia de educar a los menores sobre los riesgos del uso de internet y la necesidad de supervisar su actividad en línea.
El peligro del grooming y las falsas ofertas laborales
El grooming, una de las modalidades más peligrosas de explotación, comienza en redes sociales o plataformas de juegos en línea, donde los delincuentes crean perfiles falsos para ganarse la confianza de los menores. A partir de allí, los agresores buscan obtener imágenes comprometedoras o concretar encuentros con fines de explotación sexual o laboral.
Otra modalidad común de la trata de personas en Perú son las falsas ofertas laborales, dirigidas principalmente a jóvenes que buscan empleo rápido. Estas «oportunidades» suelen esconder fines de explotación y ponen en riesgo la seguridad de los menores, especialmente cuando implican el envío de documentos personales o la promesa de viajes.
Consejos para proteger a los menores
- Educación temprana: Los padres deben enseñar a sus hijos sobre los riesgos de aceptar solicitudes de amistad de personas desconocidas en internet, equiparándolo a la precaución de no hablar con extraños en la vida real.
- Supervisión constante: Es crucial que los padres mantengan una comunicación abierta con sus hijos sobre sus actividades en línea. «Saber con quién se comunican y qué páginas visitan puede hacer una gran diferencia», resalta Paulet.
- Protección de datos personales: Los menores deben ser conscientes de no compartir información sensible, como su dirección o el colegio al que asisten, pues los delincuentes pueden usar estos datos para manipularlos.
- Desconfianza ante desconocidos: Es importante recordarles que no todas las personas en línea son quienes dicen ser. El grooming, como destaca Paulet, consiste en que un adulto se haga pasar por otro menor para ganar la confianza del niño.
La lucha contra la trata de personas requiere la colaboración de todos los sectores, y la educación digital es una herramienta esencial para evitar que más menores caigan en manos de delincuentes.
