El reporte de la organización internacional Human Rights Watch (HRW), sobre las protestas contra Manuel Merino del último 14 de noviembre, señala que «la policía usó sus escopetas para disparar perdigones de plomo y canicas».
“Las declaraciones de testigos y otras pruebas a las que tuvo acceso HRW indican que la Policía empleó, de manera reiterada, una fuerza excesiva contra los manifestantes», se añadió.
De esta manera, hicieron el llamado al actual presidente Francisco Sagasti, para que promueva reformas que garanticen el derecho a las reuniones pacíficas.
Human Rights Watch es una organización de derechos humanos no gubernamental y sin fines de lucro, conformada por aproximadamente 400 miembros situados en todo el mundo. Su personal está integrado por profesionistas en derechos humanos, incluidos expertos de los países en los que operan, abogados, periodistas y académicos de diversos orígenes y nacionalidades.