Un total de 11 521 personas, entre adultos, adultos mayores, gestantes y menores de edad, se atendieron por COVID-19 en el Hospital Nacional Arzobispo Loayza, de las cuales 1902 fueron hospitalizadas al presentar una condición de salud de moderada a grave, informó el Ministerio de Salud.
El doctor José Huamán Muñante, director general de este establecimiento de salud, explicó que este número importante de atenciones médicas, realizadas de marzo a setiembre, pudo ser posible luego de que implementaran 255 camas de hospitalización y 24 en la Unidad de Cuidados Intensivos para pacientes afectados por esta enfermedad.
El funcionario precisó que el hospital se organizó para atender la gran demanda de casos, de modo que todas las especialidades médicas y no médicas brinden soporte a los pacientes.
En esa línea, hasta fines de setiembre 1791 pacientes, considerados como moderados a graves, fueron dados de alta tras lograr recuperarse de la infección. Muchos de ellos volvieron a sus hogares tras permanecer varios días conectados a ventiladores mecánicos.
«Entre las principales complicaciones que presentan los pacientes afectados por COVID-19 se encuentran problemas pulmonares como neumonía, cardiológicos como taquicardia sinusal, problemas neurológicos y de salud mental», indicó el especialista.
Pacientes crónicos y vulnerables
La pandemia a consecuencia de la COVID-19 también obligó a una serie de cambios en los servicios de salud y en el Hospital Loayza en específico se implementaron estrategias que permitieron continuar las atenciones de la población altamente vulnerable y que requiere el seguimiento de sus tratamientos.
«Así, recibieron atención por consulta externa: pacientes oncológicos, pacientes que viven con VIH, pacientes con insuficiencia renal crónica, pacientes con pie diabético, entre otros, superando las 39 000 atenciones, entre marzo y setiembre del presente año», informó Huamán Muñante.
Agregó que esta estrategia se reforzó con las teleconsultas brindadas por médicos, enfermeras y otros profesionales de la salud como psicólogos, que atendieron desde sus casas mediante trabajo remoto, sumando 56 709 llamadas en el mismo rango de meses.