El presidente ruso Vladimir Putin llamó el viernes al ejército ucraniano a “tomar el poder» en Kiev y derrocar al presidente Volodimir Zelenski y a su entorno, a los que calificó de «neonazis y drogadictos».
«Tomen el poder entre sus manos. Me parece que será más fácil negociar entre ustedes y yo», lanzó Putin al ejército ucraniano en una intervención en la televisión rusa.
El presidente ruso afirmó que no combate a unidades del ejército sino a formaciones nacionalistas que se comportan «como terroristas» usando a civiles «como escudos humanos», al colocar sus armamentos en zonas civiles.
«Luego quieren acusar a Rusia de provocar víctimas entre la población civil» agregó.
Putin también calificó al presidente Zelenski y sus ministros de «banda de drogadictos y de neonazis, que se ha instalado en Kiev y toma como rehén a todo el pueblo ucraniano».
Moscú califica a las autoridades ucranianas de “neonazis» o de «junta» desde 2014 y el estallido de una guerra en el Este de Ucrania entre separatistas prorrusos y las fuerzas de Kiev, pese a que Zelenski tenga orígenes judíos.