Por: Raúl Sotelo L.
La selección de fútbol de la FPF (así se lee en las camisetas de los jugadores), está penúltimo en la tabla de posiciones con 11 magros puntos, vía al mundial de Qatar.
Juan Carlos Oblitas, director deportivo de la Federación, a quien le llaman «ciego» (por algo será), ha declarado seguro de sí mismo que «el DT Ricardo Gareca está fijo hasta que terminen las clasificatorias (¿?). Solo podrían prescindir de él, si los jugadores no lo aguantan (motín), o renuncia por razones personales». O sea que Gareca ha recibido un voto de confianza de la FPF.
En la selección no existen jugadores con temperamento alto, ni uno, que levanten su voz de protesta solicitando el «desafuero» del entrenador argentino, si es que la selección siguiera cuesta abajo en la rodada. Al lado del tigre son unos gatitos asustados.
Que Gareca tome sus maletas y aborde el avión rumbo a su casa, no lo hará ni jugando, porque vive enamorado perdidamente de sus salarios que los seguirá cobrando puntualmente. Ahora más que Oblitas le ha dado su santa bendición.
A él le dicen El Tigre, de tal manera que una raya negra más en su curtida piel no le hará cosquillas. El «Ciego», que no ve nada claro más allá de sus narices, le ha prometido a Gareca que no habrá desafuero.
En política y en fútbol, el Perú no está clasificado.