Medios iraníes estatales afirmaron que los ataques contra dos de las bases de EE.UU. en Irak, habrían dejado 80 víctimas, siguiendo como fuente principal a los Guardianes de la revolución.
Además, se informó que se registraron pérdidas materiales como helicópteros y demás equipos militares.
El líder iraní, Alí Jamenei, indicó que la mencionada medida «no es suficiente», dejando en evidencia que este conflicto estaría lejos de acabar.
Según fuentes del gobierno de Irak, el primer ministro de este país, Adel Abdul Mahdi, fue informado previamente sobre el ataque y que las intenciones de estas eran específicamente contra Estados Unidos.
“Terroristas estadounidenses”, como se los llama, habrían fallecido debido a los ataques como respuesta al asesinato de Soleimani.
De esta manera, los Guardianes de la revolución mencionaron que tienen 140 blancos estadounidenses que podrían ser atacados “si los estadounidenses vuelven a cometer un error”.
Sin embargo, aún no se confirma completamente la veracidad de los mencionados hechos, puesto que por otro lado, Trump afirmó que la situación «estaba bien».