La reina Isabel II, la monarca más famosa del mundo, falleció el jueves a los 96 años en su castillo escocés de Balmoral, con su familia a su lado. Su hijo mayor, el príncipe Carlos, se convirtió automáticamente en nuevo monarca.
«La reina murió en paz en Balmoral esta tarde. El rey y la reina consorte permanecerán en Balmoral esta noche y regresarán a Londres mañana», informó el Palacio de Buckingham en un comunicado, conmocionando al Reino Unido y al mundo.