Recientemente el presidente del Consejo de Ministros, Guido Bellido, aseguró que no está en agenda una cercana sesión de Consejo de Estado, negando así que actualmente exista una crisis política.
El Consejo de Estado es la instancia que reúne a las más altas autoridades de los tres poderes del Estado, es decir, al Presidente de la República y a los titulares del Congreso y del Poder Judicial.
Usualmente asisten también el fiscal de la Nación y el presidente del Tribunal Constitucional, entre otras autoridades.
Las reuniones del Consejo de Estado tienen como objetivo discutir temas de alta urgencia para el país.
Como se recuerda, recientemente el Poder Judicial (Elvia Barrios), Ministerio Público (Zoraida Ávalos) y la Contraloría General de la República, solicitaron formalmente la mencionada instancia.
Además, afirmó que hay un plan para vacar a Pedro Castillo.
“No existe ninguna (crisis). Ese es el propósito de las bancadas, los partidos políticos que han perdido, quieren hacer parecer eso. Ese es un plan para traerse abajo al Gobierno», dijo Bellido.
“Son estrategias que este sector antipatriota que han estado 200 años en el poder pretenden hacer, pero la población no les va a hacer caso”, añadió.
En Cusco, mediante un pronunciamiento, presidentes de comunidades originarias pidieron el cambio de Bellido ya que según argumentan, las reuniones previas con el personaje no fueron fructíferas.
El coordinador del pronunciamiento, Flavio Huanque, señaló que la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM), no conoce la agenda indígena.
“Hacemos un llamado al presidente de la República para que en el más breve plazo se corrija el rumbo del Gobierno y se remueva del cargo al ministro Guido Bellido Ugarte”, se lee en el comunicado.
¿Qué es una Crisis Política?
Una crisis política es el resultado de la falta de valores éticos de gobernanza (que promueve los buenos principios democráticos), caracterizado por objetivos del Gobierno diferentes de los del electorado, además de afectar a la economía del país en cuestión.
El subdesarrollo es un problema de falta de recursos económicos, pero también se asocia en gran medida con políticas volátiles, instituciones disfuncionales y estructuras sociales altamente diferenciadas.