El Poder Judicial rechazó prolongar por 12 meses el arresto domiciliario de la exalcaldesa de Lima, Susana Villarán.
Como nueva medida, se le impuso comparecencia con restricciones.
A partir de ahora, la exalcaldesa deberá acatar una serie de restricciones, que incluyen la prohibición de comunicarse con coimputados, con testigos o con peritos del caso por el que se le viene procesando.
La decisión expuesta esta tarde por el juez Jorge Chávez será apelada por el Ministerio Público, según señaló su representante al término de la lectura de la resolución correspondiente.
En opinión del magistrado, esta variación en la situación jurídica de Villarán no pondrá en riesgo el proceso penal al que viene siendo sometida en el contexto del caso Lava Jato.
Villarán es investigada por lavado de activos, asociación ilícita y cohecho pasivo propio en el marco de los casos OAS y Odebrecht.