Por: Raul Sotelo L.
El presidente Castillo tiene al frente a dos poderosos enemigos como son el Congreso de la República y la Fiscal de la Nación, cuyos propósitos son desaforarlo del Palacio de Gobierno a como de lugar; con el añadido que el mandatario se ha disparado a los pies con sus desaciertos e incapacidad, y ser autor de posibles delitos de todo calibre.
Se podría decir que el Congreso es una jaula de lobos con ansias incontenible de devorarlo, y como no han podido vacarlo hasta ahora , la fiscal Patricia Benavides se lo ha ofrecido en una bandeja.
El voluminoso expediente que contiene la denuncia constitucional contra el mandatario formulado por dicha funcionaria, ha sido entregado precisamente a la fieras que devoraran a Castillo con zapato y todo lo demás que lleva encima.
Al parecer la suerte del presidente está echada, y ya podría ir alistando sus maletas. Lo menos que le puede suceder es la suspensión de sus funciones, algo así como unas vacaciones anticipada; y como los congresistas tienen ahora la sarten por el mango tratarán de conservar sus curules y privilegios
El único frito en la sarten y con aceite negro, será don Pedro Castillo Terrones. La pregunta es: ¿Pasará la Navidad en Palacio?
Negros nubarrones y tormentas se avisoran en el horizonte, y culpables son los políticos tradicionales y gente de poder, por su desmedida voracidad por el dinero mal habido y el poder ilimitado.
¡Que Dios salve al Perú! Si es que puede.